Soter: La otra tarea de Rosa Icela Rodríguez
Por Sergio Noble
Soter es la personificación de la seguridad, la conservación y la liberación de cualquier daño.
México.- El 30 de diciembre de 1959 el presidente Adolfo López Mateos creo el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores al Servicio del Estado (ISSSTE). Antes, el 19 de enero de 1943, el Presidente Manuel Ávila Camacho había creado el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) para garantizar el acceso integral a la salud de los trabajadores.
Sin lugar a dudas aquellos dos hechos, fueron verdaderamente relevantes en la historia social del país porque significaban un importante beneficio tanto para los trabajadores de empresas privadas como para quienes prestaban sus servicios al Estado.
Pero hablemos de manera particular del ISSSTE. Esta institución con sus claro-oscuros ofreció durante varias décadas, importantes servicios de salud a empleados gubernamentales; cirugías que permitieron salvar muchas vidas, pero desgraciadamente, aunque parezca la misma cantaleta, fue víctima de los gobiernos neoliberales.
A partir esos regímenes la institución se convirtió en un botín de los funcionarios. Era su caja chica personal, el cajón para las campañas del PRI, pero se dieron cuenta que podía ser un espacio para hacer grandes negocios.
Tal vez, antes que Pemex, se decidió quebrarlo; los servicios a los que estaba obligado prestar, perdieron calidad a propósito para justificar su cuasi privatización que se practicó allí desde, al menos, el gobierno de Ernesto Zedillo, maña que prevaleció con Vicente Fox, Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto.
El martes pasado el presidente Andrés Manuel López Obrador volvió a tocar el tema cuando, en su conferencia de prensa “mañanera”, denunció que en el ISSSTE están enquistados “mafias de exfuncionarios y proveedores que buscan perpetuar el negocio que han construido por décadas con cargo al erario y a costa de la salud de los trabajadores”.
Para hacer frente a estos grupos volvió a recordar que le encargó a la secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, Rosa Icela Rodríguez, llevar a cabo una “limpia” al interior del organismo de salud donde desde hace unos meses la funcionaria está trabajando en una tarea, echar del ISSSTE al llamado “cártel de la salud” que le produce al año más de cinco mil de millones de pesos de gancias.
La corrupción es un gravísimo problema de salud que enfrenta el ISSSTE. En 2019, un juez federal vinculó a proceso penal a ocho funcionarios y ex funcionarios del Instituto quienes fueron acusados de un fraude por más de 831 millones de pesos, relacionados con la adquisición de equipo médico y material de curación. Servidores públicos participaron en un esquema mediante el cual el ISSTE liquidó de manera irregular facturas que ya habían sido devengadas a favor de la empresa Selecciones Médicas del Centro.
La compañía de fármacos especializados fue favorecida con más del 60 por ciento de las licitaciones que se realizaron en el sector salud durante el gobierno de Enrique Peña Nieto.
Efectivamente como ha acusado el presidente, los gobiernos anteriores “destruyeron el Sistema de Salud Pública para privatizar la salud”; se quedó sin médicos, se corrompió todo el sistema de abasto de medicamentos, además de que desaparecieron a propósito laboratorios clínicos, lo mismo que los bancos de sangre, ortopedia, laparoscopía, hemodiálisis y cardiología, es decir, el personal del ISSSTE dejó de prestar estos servicios que se encargaron a empresas privadas.
Es lamentable cómo es que esta gran institución fue “quebrada” para hacer grandes negocios en favor de una mafia de ex funcionarios que eran nombrados como titulares, pero no para fortalecerla sino para enriquecer a una mafia neoliberal.
López Obrador ha denunciado que hay serias resistencias de estos grupos de ex servidores públicos que a través de medidas legaloides buscan seguir haciendo negocios y por ello dijo que la secretaria de seguridad tiene toda su confianza para acabar con las tranzas que vive el ISSSTE.
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